miércoles, 12 de julio de 2017

Cómo no te voy a querer

El otro día le oí a un amigo decir, medio en broma medio en serio, que Sam era una basura de personaje, más o menos. Yo no podía creer lo que estaba oyendo. Que lo digas de cualquier otro, Peter, te lo puedo pasar, pero justo de Sam... ¡De Sam Gamyi!

Y es que Sam no es un personaje más de El Señor de los Anillos. No es ese secundario que alguno puede creer que es, que ni fu ni fa, que acompaña a Frodo y que sí, muchas veces le ayuda y le saca de muchos líos, pero como podría haberlo hecho cualquiera si estuviera en su lugar. Y no, es mucho más que eso. En un primer momento Sam aparece como el simple jardinero de Frodo, del "Señor Frodo", como él le llama durante toda la historia. Pero pronto se convierte en su mejor amigo, porque es el que siempre está apoyándole, incondicionalmente. Se da cuenta de que Frodo necesita a alguien que le ayude en la difícil tarea que tenía que llevar a cabo, y no duda en ser él el que tome, a su vez, esa otra gran responsabilidad, como es la de proteger al Portador del Anillo. Y lo hace sin permitirse un despiste, un momento de relajación o una queja. Incluso cuando Frodo, poseído por el Anillo Único y embaucado por Gollum, le echa de su lado, Sam vuelve y le salva de una muerte segura y del fracaso de la misión.

Esta forma de ser se aprecia en una gran cantidad de detalles a lo largo de las tres películas. Para empezar, en La Comunidad del Anillo, cuando por ejemplo es el primero que llega para ver cómo está Frodo al ser herido en la Cima de los Vientos o cuando no duda en salir nadando para alcanzarle, a pesar de que no sabe nadar, para que no vaya sólo en su viaje a Mordor. Luego, en las dos siguientes, es algo constante y que destaca mucho más, ya que es el único de la Compañía que queda para acompañar al Portador. Por destacar algo, el momento en el que le salva al final de Las dos torres, teniendo a continuación uno de los mejores discursos de la trilogía, y cuando, en El retorno del Rey, se echa a hombros a Frodo para llegar a la cima del Monte del Destino.

En definitiva, que Samsagaz Gamyi es para mí, sin duda alguna, el mejor personaje de toda la trilogía. Por su valentía y amistad, por su bondad, por ser el que, sin destacar, siempre está para lo que haga falta, con el que siempre se puede contar. Así que, por favor, que nadie más me vuelva a decir que Sam está sobrevalorado o algo por el estilo. El que me lo dijo, poco después se retractó. Lógico porque, ¿cómo no le vas a querer?

Sam en el Monte del Destino
Discurso Sam Las dos torres

No hay comentarios:

Publicar un comentario