-Estás en el infierno hombrecito: y yo soy el diablo.
-Tú no eres el diablo. Solo eres un pobre diablo.
-¿ Y Para qué nos caemos Bruce? Para aprender a levantarnos.
-Busco los medios para combatir la injusticia, para usar el miedo contra los que se aprovechan de los temerosos.
-¿Qué importa como me llame? Se nos conoce por nuestros actos.
-Si quieres controlar los miedos ajenos primero tendrás que saber controlar los tuyos.
-Un hombre que se pasa las noches escalando tejados y saltando de azotea en azotea no creo que me pueda recriminar que tenga doble personalidad.
-El entrenamiento no es nada. La voluntad lo es todo. La voluntad de actuar.
-Si consigues ser algo más que un hombre, si te entregas a un ideal, si nadie puede detenerte, te conviertes en algo muy diferente.
-¿En qué?
-En una leyenda, Señor Wayne.
-No voy a matarte: pero tampoco tengo por qué salvarte.
-Ya que tú puedes ser o tener buenos sentimientos: amable , con conocimientos, aptitudes..., es decir, ser una buena persona, pero solo lo llevas por dentro, y si lo que reflejas es lo contrario, eso es con lo que te juzgarán los demás, eso será... lo que eres realmente.
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